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  • Foto del escritorHECTOR TREJO CHAMORRO

Programa Desafío de Jóvenes Investigadores

Actualizado: 15 abr 2021

La investigación es un juego!


El Desafío de Jóvenes Investigadores es una estrategia pedagógica diseñada para fortalecer y motivar el espíritu investigativo, desarrollar habilidades, destrezas y generar en la juventud el gusto por la investigación y la ciencia.

Su objetivo general está centrado en fortalecer y motivar el espíritu investigativo de la juventud a partir del desarrollo de capacidades, habilidades, destrezas y gusto por la investigación y la ciencia.


ESPECÍFICOS

-Desarrollar capacidades, habilidades y destrezas investigativas en los jóvenes

-Fortalecer las actitudes y aptitudes de los jóvenes hacia la investigación

-Generar espacios para el trabajo en equipo y colaborativo de los jóvenes

-Promover el espíritu investigativo, científico y emprendedor

-Incentivar la lectura, la investigación y la escritura

-Promover la lúdica, la creatividad y el desarrollo del pensamiento CIENTÍFICO

-Potenciar la autoconfianza en la juventud Aprender investigar investigando.


FASES DEL DESAFÍO


El desafío de Jóvenes Investigadores tiene tres fases organizadas a partir de las letras D+J+I


Las letras componen la Ruta de Investigación y cada una tiene su significado, sentido lúdico, propósito y metodología.


DESAFIÓ

: Se representa metodológicamente con la letra D y están implícitas las siguientes palabras: Destrezas, Esfuerzo, Superación, Audacia, Fortaleza, Imaginación y Osadía.


JÓVENES: Se representa metodológicamente con la letra J y están implícitas las siguientes palabras: Jovialidad, Orgullo, Vigor, Expresión, Naturalidad, Espontaneidad, Sencillez.


INVESTIGADORES: Se representa metodológicamente con la letra I y están implícitas las siguientes palabras: Imaginación, Negociación, Veracidad, Estudio, Sensibilidad, Trabajo, Incertidumbre, Grupo, Argumentación, Dedicación, Organización, Recursividad.


Las tres fases o etapas se centran en el desarrollo de capacidades, habilidades y destrezas, desarrollo del potencial humano y desarrollo de competencias investigativas y científicas.


EXPERIENCIAS APRENDIDAS DEL DESAFÍO (Departamento del Putumayo 2016)






LOS NUEVAS ESTRATEGIAS DEL DESAFIO


SEMINARIO TALLER: FORMAR JÓVENES INVESTIGADORES: EL RETO DE LA EDUCACIÓN


Presentación


La experiencia en la formación en investigación sugiere un proceso pedagógico que debe ser construido y orientado desde varios presupuestos y metodologías. Fortoul, (2011) sostiene que


· Los estudiantes del nivel de pregrado tienen una formación y una experiencia muy limitada en los temas científicos.

· Las metodologías de la investigación son difíciles de enseñar de manera teórica y con complementos prácticos, su lenguaje es particularmente complejo y saturado de formalismos para el estudiante.

· La disponibilidad de literatura sobre didáctica de la investigación es limitada, también es muy escasa la reflexión sobre experiencias de formación investigativa que sirvan como recurso docente.

· A pesar del incremento del uso y del manejo de tecnologías de la información y de la comunicación, ello poco se revierte en beneficio de la formación en ciencia e investigación en el pregrado.

· Los currículos en el ámbito investigativo ponen su acento en las capacidades instrumentales que permitan al estudiante distinguir los pasos y los diseños de investigación, poco se arriesga en docencia para la formación de una cultura investigativa que, sobre todo, promueva la capacidad del estudiante de interrogar, criticar y de evaluar el conocimiento dado como válido en los procesos de formación.

· Usualmente, las universidades no cuentan con espacios extracurriculares suficientes para complementar la formación científica, se carece de una estructura fuerte de actividades que permitan hacer un proceso continuo de formación y de incorporación de los jóvenes a la comunidad académica formalmente reconocida donde los grupos de investigación deberían constituirse en los mejores espacios de aprendizaje y aprestamiento para la investigación.


Estos presupuestos no solo hacen más complejo el proceso de formación, también constituyen obstáculos cotidianos para un aprendizaje más significativo que provoque en el estudiante una actitud y un deseo de continuar un proceso de educación científica. Al mismo tiempo, estos obstáculos permiten proponer una guía docente para organizar más eficazmente el contenido y las estrategias en el desarrollo explícito de la formación investigativa y la investigación formativa.


La propuesta sobre el Desafío de Formar Jóvenes Investigadores es un reto superior que implica la puesta en escena una estrategia pedagógica que busca de acuerdo con Maldonado (2006) que cada sujeto y activo investigador, logre desarrollar la pasión por conocer, la pasión por las ideas, la pasión por el descubrimiento, la pasión por la invención y por el descubrimiento de lo verdadero.


El desarrollo de la estrategia pedagógica D+J+I contempla reglas para el trabajo colaborativo y/o trabajo en equipo y rompe con los obstáculos de la visión tradicional de formar investigadores en el aula. Según Maldonado (2006), no es posible enseñar a investigar, analógicamente, como tampoco es posible enseñar ética, enseñar a pensar y en términos más generales, enseñar a vivir. Pero seguramente, si es posible aprender a desarrollar habilidades, destrezas, competencias, aptitudes y actitudes en torno a la investigación formativa y formación investigativa.


El seminario taller D+J+I, cuyo origen se remonta al curso de proceso Investigativos en en el ITP (2009), es una experiencia de trabajo en equipo que moviliza una serie de pasos hacia la comprensión de los procesos de investigación de forma lúdica y creativa. Se implican actividades para el desarrollo de habilidades de pensamiento, competencias y destrezas que implican el concurso de los participantes. Ante todo sensibiliza en la investigación formativa y en la necesidad de crear una cultura que hace de la investigación una estrategia de aprendizaje significativo.


La investigación en una Institución Tecnológica implica reconocer los distintos niveles de formación investigativa y científica de tal forma que el proceso se desarrolle a través de ciclos propedéuticos, es decir, que contemple las distintas fases de la educación y que le permita al estudiante desarrollarse según sus intereses y capacidades. Hay que decir que “los ciclos son unidades interdependientes, complementarias y secuenciales; mientras que el componente propedéutico hace referencia al proceso por el cual se prepara a una persona para continuar en el proceso de formación a lo largo de la vida, en este caso particular, en el pregrado” (MEN, 2009). En otras palabras “Se concibe como un conjunto de competencias relacionadas con el conocimiento, su uso y aplicación en diferentes contextos, así como el desarrollo de actitudes, responsabilidades y valores” (CONACES). Formar en investigación en ciclos propedéuticos implica pensar en los desarrollos personales de cada estudiante en virtud de sus capacidades, habilidades y destrezas. La grafica uno muestra el contenido sobre los cuales se puede hacer una propuesta de formación investigativa implicando la D+J+I.


Justificación


La formación de investigadores es una tarea compleja que desarrollan las universidades. Araujo García, et al, expresan que

la universidad como institución de la educación superior, es la encargada de formar a los estudiantes para que se conviertan en ciudadanos informados y profundamente motivados, provistos de un sentido crítico y capaces de analizar problemas relacionados con la práctica profesional, buscar soluciones, aplicarlas y asumir responsabilidades sociales. Para ello debe propiciar la adquisición de conocimientos prácticos, competencias y actitudes para la investigación científica fomentando el pensamiento creativo y crítico, la reflexión, el trabajo independiente y en equipo (p. 167).


La investigación, aunque en apariencia se nos muestra como una infinita sucesión de fórmulas, cálculos y experimentos que interesa a unos pocos, es en el fondo la herramienta crítica y lúdica más efectiva para alimentar el conocimiento y mejorar la calidad de vida de los humanos. En palabras de Parra (2007),


los procesos investigativos se estructuran de manera similar a la construcción y manifestación de los relatos, y constituyen una expresión de la cultura, de la historia. La investigación se fusiona con el juego y adquiere sus múltiples acepciones y variadas interpretaciones; así puede inclinarse fácilmente hacia un camino investigativo donde se encuentran presentes, por lo menos: el azar, la duda, la incertidumbre, la observación, el registro, el riesgo, el análisis, la fortuna, el placer, el investigador, el equipo, las probabilidades, la búsqueda, el encuentro, los juguetes, el jugador y el juego (p. 15).

Sin embargo, en el contexto de la universidad, la investigación no se mira como una herramienta ACTIVA sino como una "función sustantiva de la universidad" y un requisito de grado en el sentido de elaborar un producto de investigación, llamado “trabajo de grado”, seminario de grado o trabajo de investigación, algunos dicen “Tesis”.


El objetivo de esta propuesta es hacer modificaciones estructurales cognitivas considerando a la investigación como una cosa de niños y un cuento de Hadas (Parra, 2017) que en palabras del autor citado se pretende hacer de la investigación un camino placentero, que, sin desviarse de la seriedad y la cientificidad, es asequible a quien guste de la misma y a quien disfrute sumergiéndose en el ámbito cuantitativo tanto como en el cualitativo (p. 17)


El desafío de formar jóvenes investigadores como propuesta pedagógica trabajo sobre esta perspectiva de juego e investigación (Parra, 2007) y se inscribe en el marco de un cambio de cultura o de paradigma. El propósito se centra en desarrollar competencias investigativas que permitan a los estudiantes promover la autoconfianza, desmitificar la ciencia, estimular la curiosidad, propiciar el goce por la lectura y la escritura, propiciar el desarrollo de la creatividad, avivar la pasión y el entusiasmo, fomentar la realización de los sueños y generar un alto grado de compromiso-afecto-emoción (Castillo, 1999).


La respuesta a estas preguntas COMO: ¿Cómo lograr que la formación en investigación y la investigación formativa (que no son la misma cosa) constituyan las dos caras de una misma moneda? ¿Cómo se podrá llegar a una necesaria simbiosis entre maestro y discípulo para formarlo como Joven Investigador? ¿Cómo fortalecer las competencias investigativas en pregrado y Postgrado? se miran posibles a través de la creación de una cultura de la investigación que a su vez estimule la configuración de comunidades académicas y grupos de semilleros de Investigación, semillero de estudio, semilleros de proyección,, semilleros de indagación, etc. Que se haga posible la ‘formación investigativa’ y la ‘investigación formativa’ ya que estas son las dos caras de una misma moneda y que se identifique, seleccione y provoque en los estudiantes vocación y capacidad para la investigación, con el fin de que la institución universitaria pueda formar sus propios cuadros futuros de científicos y ciudadanos.


Esto supone que el desarrollo de competencias relacionadas con la investigación y el juego deben apoyar la estimulación de la creatividad, los procesos mentales, llevar a la interacción, se acercar a los estudiantes a la realidad. (Parra, 2007).


Objetivos de la Propuesta


General


Desarrollar una propuesta didáctica denominada el desafío de Formar Jóvenes Investigadores (D+J+I) que permita fortalecer las competencias investigativas interpretativa y argumentativa en estudiantes de los programas académicos, técnicos profesionales, tecnológicos y profesionales del Instituto Tecnológico del Putumayo.


Específicos

  • Desarrollar capacidades, habilidades y destrezas investigativas en los estudiantes de ciclos propedéuticos y semilleros de investigación

  • Fortalecer las actitudes y aptitudes de los estudiantes hacia la investigación formativa e investigación formativa

  • Generar espacios para el trabajo en equipo y colaborativo de los estudiantes

  • Promover el espíritu investigativo, científico y emprendedor

  • Incentivar la lectura, la investigación y la escritura

  • Promover la lúdica, la creatividad y el desarrollo del pensamiento

  • Potenciar la autoconfianza en los estudiantes para el proceso de la investigación.

  • Aprender a investigar investigando y jugando.


Proceso metodológico


El taller sobre el Desafió de Formar Jóvenes Investigadores asume el proceso de la estrategia D+J+I. Este proceso se asume en la relación formación investigativa y juego. Contempla una serie de fases que despiertan el interés por las competencias investigativas de los estudiantes en ciclos propedéuticos y/o grupos de investigación (Semilleros). Estas competencias están centradas en los niveles de formación. El cuadro 3 y 4 muestra las competencias según los niveles de formación.


Los planes de estudio en el ciclo tecnológico se organizan en tres niveles con características y objetivos claramente definidos, así:

Básico

Fundamentación en ciencias básicas para que los estudiantes puedan que diseñar y crear bienes y servicios, para desarrollar una actividad determinada haciendo uso de procesos y herramientas según demande el caso.


Específico

Formación dirigida a proveer elementos y herramientas de trabajo concretas y precisas para quienes optan por esta información, que en esencia, cubre además de fundamentos básicos, la capacidad de adaptarse y moldearse a diferentes experiencias de carácter laboral.


Práctico

Formación orientada a promover en los estudiantes el desarrollo de capacidades, conocimientos y destrezas relacionadas con desempeños profesionales propios del contexto socio productivo de cada especialidad y vinculación con el campo ocupacional hacia el cual se orienta su formación.


Los planes de estudio en el ciclo tecnológico se organizan en tres niveles con características y objetivos claramente definidos, así:

Básico

Específico

Practico


Los planes de estudio en el ciclo profesional se organizan en tres niveles con características y objetivos claramente definidos, así:


Para el Nivel técnico profesional


Los Técnicos profesionales realizan una investigación exploratoria con el propósito de destacar los aspectos fundamentales de una problemática determinada y encontrar los procedimientos adecuados para elaborar una investigación posterior. Este tipo de investigación permite afianzar el tema a trabajar y da el soporte para el logro de resultados.


Para el Nivel Tecnológico


Los Tecnólogos realizan una investigación descriptiva cuyo método se centra en al análisis. Se logra identificar un objeto de estudio donde se conocen características y propiedades, esta clase de investigación también constituye la base para profundizar en diferentes temas de estudio futuro.


Para el Nivel profesional


Los Profesionales realizan una investigación correlacional que requiere la combinación de métodos analíticos y sintéticos, en conjugación con el deductivo y el Inductivo, se trata de responder o dar cuenta de los porque del objeto que se investiga.

[1]Estos criterios se basan los datos que proporcional la Institución TEINCO que forma profesionales a través de ciclos propedéuticos. Se trata de un modelo de investigación. https://teinco.edu.co/index.php/mi-teinco/investigacion/modelo-de-investigacion/

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